La compra de productos de segunda mano y la responsabilidad del vendedor

Cuando se compra un producto de segunda mano, es importante conocer si el vendedor es un particular o un comercio/profesional, ya que los derechos y obligaciones del comprador serán distintos según la ley que se aplique.

En el caso de que el vendedor sea un profesional, se aplicará preferentemente la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y, de manera supletoria, el Código Civil. Si se trata de una compraventa de bienes o suministro de contenidos o servicios digitales, el empresario será responsable de las faltas de conformidad del producto durante un plazo de tres años.

En cambio, si el vendedor es un particular, se aplicará el Código Civil y la legislación autonómica correspondiente. En estos casos, el comprador puede reclamar al vendedor los defectos y vicios ocultos del producto en un plazo de 6 meses desde la entrega del mismo.

En cualquier caso, si el vendedor incumple las obligaciones de la compraventa, el comprador puede exigir el cumplimiento del contrato o resolverlo, con el resarcimiento de los daños y perjuicios causados. Si una de las partes actúa con dolo, negligencia o morosidad, la otra parte puede reclamar los daños y perjuicios causados.

Es importante tener pruebas e indicios de la compra, como conversaciones de whatsapp o e-mails, transferencias bancarias y pagos, en caso de que el contrato de compraventa sea verbal.

En resumen, al comprar un producto de segunda mano, es fundamental conocer los derechos y obligaciones del comprador y vendedor, así como la legislación que se aplica según el tipo de vendedor.